Equitación Natural

Cuando lo guío, me elevo, soy como un halcón. Trota el aire, la tierra canta cuando la toca y el cuerno más bajo de su casco es más musical que la pipa de Hermes.”
William Shakespeare

Desde 2005, la manada de 90 caballos lusitanos cabalga libremente por las 700 hectáreas de la Finca La Donaira. Ese fue el comienzo de nuestra actividad con los caballos, y también el comienzo de la filosofía bajo la cual los criamos: la equitación natural, también conocida como doma con susurrador de caballos.

Nuestras yeguas, cuidadosamente seleccionadas con líneas de sangre de granjas de sementales como Casa Cadaval, Guilherme Borba, Sociedade das Silveiras y Bessa Solar Pinhas, se mantienen libres en grupos por el paisaje de árboles centenarios. Desde el nacimiento de nuestros potros hasta que tienen alrededor de tres años, deambulan por las onduladas montañas, y se desarrollan teniendo a sus madres como guías e interactuando con las otras yeguas de la manada.

La equitación natural hace que los caballos jóvenes aprendan, jueguen y crezcan sanos y fuertes, con corazones robustos y almas dóciles. En esta parte del trabajo con el hombre, crear y forjar un vínculo de confianza y respeto entre el caballo y los humanos, es supervisado en La Donaira por Seamus, nuestro susurrador de caballos. Según él “el contacto adecuado desde el nacimiento asegura un caballo joven y seguro”.